3 de febrero de 2016

Cansancio

¡He regresado!

No se por cuánto tiempo pero justo hoy venía pensando que hace mucho no escribo y para ser honesta, a veces me siento un poco mal, porque este blog en particular; me ha dejado muchas experiencias. 

¡Vaya título para regresar! Sólo que así están las cosas. 

Llevo una semana enferma, hace unos días con unas temperaturas horribles acompañadas de dolor en las articulaciones. Y ahora mi hijo también enfermó. No por eso la vida se detiene, al contrario, cuando estás en cierto stand by te das cuenta de lo vertiginoso que es el ritmo que nos cargamos. Y no paramos. Llegamos a casa hace tres horas, mi hijo ya duerme, yo buscaba información para alimentar la página que actualmente administro, además peleaba con la conectividad de internet. Luego se me ocurrió que quizá era bueno venir acá y respirar. 

Hace días pienso muchas cosas, sobretodo en las condiciones que tenemos las mujeres. Todo esto derivado de un taller que tomo en la actual escuela de mi hijo. La mayoría mujeres, decían que ese taller; era como darse un respiro, un tiempo para ellas. Yo aunque en ocasiones me lo doy, pensaba en lo privilegiada que puedo ser, para después llegar a la conclusión de que me ha tocado batallar para ganarme esos privilegios y que las situaciones que hay a mi alrededor; algunas, son consecuencia de eso. Si bien me falta muchísimo y hay situaciones que me parecen injustas, creo que ya puedo exteriorizarlo de forma más consciente. 

También me llegó a la mente mi estado actual: la soledad. Como desee tener un compañero tal cual y sin miedo a decirlo que me cuidara. Así que entre mi alucín de la temperatura y mis pocas intenciones de moverme de la cama deseaba tener a una pareja cerca, aunque tampoco estaba dispuesta a soportar a cualquier idiota con tal de no sentirme sola, venía la rudeza de pronto a mi cabeza. Entonces preferí estar de nuevo sola, con lo que había y con mi familia cerca después. 

Sólo que cansada, de tanto ir y venir, de las obligaciones, de las responsabilidades, de los pensamientos y de hacer mil intentos para que esta sensación se vaya. Mejor que pase. Que se tome su tiempo, ya no quiero luchar más por esto. 


15 de junio de 2014

¡Feliz día del padre!

Me tocó terminar el día con una llamada a mi papá: ¡Gracias por tu apoyo papá, por tus consejos y por amar a mi hijo de la forma en que lo haces! Se le entrecortó la voz y me dijo: te paso a tu mamá. No porque no sienta, sino porque es el lenguaje en el que tu y yo nos entendemos pá. 


30 de abril de 2014

¡Feliz día del niño!

Hoy en México se celebra el día del niño. He visto circular infinidad de imágenes en la red acompañadas de frase como: "rescata el niño interior". Imágenes que nos sugieren trabajar con nuestro niño interior para sanar nuestras heridas del pasado. Una visión religiosa nos propone que "El reino de los cielos será de los que tengan alma como niño" pero ¿a qué se refiere ésto?. Hablaré desde mi particular punto de vista, desde mi propia experiencia personal y mis resultados. 

Cuando miro a mi hijo con toda su espontaneidad, inocencia y capacidad de asombro recuerdo que alguna vez fui así y me pregunto si eso será conservar el alma de niño. Porque como adultos somos bien mañosos y tenemos esa tendencia a interpretar tramposamente las cosas a nuestra conveniencia. Entonces, ¿a qué se refieren cuando dicen que conservemos el alma de niño? Ayer lo descubrí mientras charlaba con una amiga: "tener el alma de niño es fluir como el agua sin esa imperiosa necesidad de tener todo bajo control".
Porque evidentemente hay una tendencia a sí, ser como niños. Pero de esos niños que aún no dan el salto y tienen un terrible miedo a crecer infundado no es sus propios deseos, regularmente en los deseos de complacer a alguien más. Porque la madurez no está peleada con el sentido de responsabilidad. Se puede seguir siendo responsable con el alma de niño. Con esa espontaneidad, con esas ganas de seguir descubriendo cosas, con ese asombro de mirar lo nuevo y evadiendo las complicaciones. Y no creo que no exista el miedo en los niños, pero a diferencia de nosotros; tienen esa gran capacidad de disolverlo. 

Cada uno tendrá su visión de lo que es conservar el alma de niño, pero ahora que soy madre; a través de mi hijo he visto la niña que yo fui; me doy cuenta (aunque aveces me haga la loca) de lo importante que es darles todo el amor a nuestros niños. Pero insisto una vez más, ese amor que libera y no el que asfixia. El amor que empieza hacia nosotras mismas. ¿Cuántas veces hemos escuchado esa frase " los niños son el futuro del mundo"? ¡Infinidad de veces! Pero la realidad es que mientras los adultos no hagamos consciencia de que la responsabiidad no está en ellos, sino en nosotros; las cosas no serán distintas. 
¿Por qué nos queremos lavar las manos de lo que por el momento, sólo nos corresponde a nosotros? Sí, nos corresponde buscar nuestro propio bienestar para poder brindar lo mejor de nuestro ser a los que nos rodean y eso no nos exime de que cometamos errores pero si aquí otra cosa que aprenderles a los niños;  la humildad de reconocer su falla y seguir intentándolo. 

A mi hijo siempre le digo: Emiliano! Nunca te debe dar vergüenza lo que eres, pero eso más bien me lo tendría que estar repitiendo. Porque si algo le he aprendido a mi hijo es que a través de sus acciones aprendemos ambos. 
Así que hoy que es el día del niño,además de asumir toda ésta intensidad, también la celebro con mi hijo. 



¡Feliz día del niño! 

21 de abril de 2014

A jugar! Juegos al aire libre / Juegos de la Infancia

¿Quién no recuerda  los juegos de la infancia en la que todos los primos, vecinos o hermanos, salían al patio de la casa de la abuela y jugaba por horas? Cuando veo a mi hijo jugando con mis sobrinos en la casa de mi tía y abuela, recuerdo mi infancia. El patio de la casa de mi abuela y tía era muy grande, pero ideal para correr, gritar, brincar y divertirse. 

Se me viene a la mente una de tantas veces en las que mi abuelita nos prestaba su cuerda y jugábamos la "reata" cantando "chile, mole, dulce" y conforme se decía daba más rápido la vuelta y por lo tanto los brincos eran más agitados. O las coleadas, en la que todos los niños que estábamos, nos tomábamos de las manos y el de hasta adelante corría fuerte para jalar al resto, dar vuelta y algunos, caer graciosamente. 
En la escuela, ¿Quién jugó el resorte? podía pasar horas con mis primas o en los descansos de la escuela jugando con algo tan simple: un resorte. 

Hace algunos años, Meg; del blog de Mama Liberated en su viaje a México, compartió un recurso para los padres que quieren alejarse de la cultura del consumo en  juguetes y que cuentan con un bajo presupuesto: "Fun for Nothing". Básicamente es un recurso que muchos mexicanos conocemos por que lo vivimos y es en ciertos lugares, parte de nuestra propia cultura. Son juegos de bajo presupuesto, de la cotidianidad, con materiales de fácil acceso y que garantizan largas horas de diversión en familia o con los amigos.

Aprovechando un poco y en la antesala de nuestras vacaciones, invité a mi hijo y a 2 de mis sobrinos a jugar en el patio. Parece un tanto difícil para los niños concebir juegos así cuando están expuestos a tantos estímulos o cuando como papás; recurrimos a los recursos más cómodos para apaciguar a las fierecillas que pueden traer dentro nuestros hijos: videojuegos, teléfonos, tabletas, tv. Y no por eso estoy en contra de los recursos que nos puede brindar la tecnología, pero siempre hay que encontrara un balance o por lo menos ofrecerles opciones diferentes a nuestros hijos.

Sacamos los gises de mi sobrina  y nos pusimos a jugar "Avioncito", seguramente alguien lo jugó.



¿Qué quiere jugar a la pelota?


¿Con llantas viejas?






¿Más gises?


De los mejores recuerdo que tengo de mi infancia, son en el patio de la casa de mi tía y de mi abuelita, dónde cada vez que habia una comida familiar; mis primos y yo nos poniamos a jugar hasta que nos dolieran las piernas, hasta conservar todos esos recuerdos y transmitirlos ahora, a nuestros hijos. 

Porque no todo tiene que ser un constante aprendizaje y si bien el juego es parte de eso, hay que jugar por jugar. Jugar por divertirse, por pasarla bien, por gritar, por terminar como polvorones y recargar piilas para retomar la rutina. 

29 de enero de 2014

Señales

Basta mirar con un poco de calma y dejar que las cosas sucedan como tenga que suceder.

Como hace unas tardes, cuando mi hijo me pidió que volteara al cielo: 

-Mira mamá, se ven unas ventanas en el cielo


Y muchas señales vinieron. 

5 de enero de 2014

Queridos Reyes Magos:

Emiliano recién hizo su carta y la atamos a un globo para que se fuera lejos, no contamos con que habia muchos árboles alrededor y se atorara entre las ramas, así que ahora mismo está dudando si la leerán o no. Pienso que si, aunque no es garantía de que traigan todo lo de la lista, ya veremos mañana en la mañana. 

Cuando era niña, mi madre me decía que mirara al cielo y que vieran las tres estrellas que estan siempre juntas en el cielo, esas que suelen brillar más éste día y después, bajaban materializando nuestros deseos en juguetes. Siempre lo creí, lo imaginaba una  y otra vez: las estrellas brillando cada vez más hasta que tocaban el suelo y se convertían en entes que caminaban hasta nuestra casa y dejaban los regalos.



Ahora me toca ser uno de esos "entes" luminosos que traen los regalos a mi hijo, quisiera decir que tengo todo preparado, pero la realidad es que no. Hoy busqué en particular uno de los obsequios de mi hijo y no lo encontré y estoy pensando qué recurso tendré que emplear para sustituirlo, finalmente no hay imposibles. Pero éste año en especial,  también quisiera hacer una petición a los Reyes, con toda esa ilusión que me causaba y me hacía aguardar con emoción por la noche: 

Se que deberia de importar lo bien o mal que me porté éste año, ustedes sabran pero a mi juicio; me porté como tenía que portarme de acuerdo a mis capacidades emocionales y conforme lo que pasaba. Si cuenta como portarme bien, superé una cirugía de la que aún conservo tres no tan hermosas cicatrices en mi abdomen, y digo la superé porque tuve mucho miedo y porque finalmente sirvió para darme cuenta de los que seguirían a mi lado hasta el momento. 
He sido responsable, me ha costado trabajo asumir mis propios errores y eso cuenta también como responsabilidad. He cuidado de mi hijo y se que me ha faltado cuidar de mi misma y de mi alma, en eso estoy.
Mi deseo es simple y no se traduce en juguetes o cualquier cosa material. Deseo de todo corazón que éste año se consoliden nuestros planes y que pronto tengamos la aceptación de nuestra nueva vida en compañía de mucha paz y certidumbre del rumbo hacia el que nos queremos dirigir. Les pido, que me den fortaleza para saberme capaz de sostenerme aún cuando parece que estoy a punto de derrumbarme, mucha sabiduría para tomar las decisiones necesarias, principalmente para mi y para mi hijo. Y también mucho valor para dejar atrás todo aquello de lo que ya tuvimos que aprender para poder VIVIR! Que nos mueva más el corazón cuidando la razón!Traigan mucha paz a mi alma, que se lleven los rencores y que de hasta en mis propias sombras pueda ver un pequeño resplandor.
A mucho pedir, también corresponde dar: Así que yo simplemente doy: GRACIAS! Quizá no con la completa convicción, pero sí segura de que esto que tenemos es lo necesario para que vivamos de la forma en la que decidamos. GRACIAS por mi hijo, gracias por mi FAMILIA, mis padres, hermanos, mis tíos y hasta mis primos. GRACIAS por los amigos, GRACIAS por las amigas que he encontrado en ésta vía y me han hecho sentir cobijada en la distancia. GRACIAS!
Ahora, no queda más que descansar, cerrar los ojos y dejar que la magia ocurra.

11 de diciembre de 2013

De vez en cuando

De vez en cuando...


... me encantaría ser una de esas mujeres que miras por las mañanas cuando aún estas debajo de las sábanas o alistándote para salir, de esas que tanto te gustan y que sabes son inalcanzables...

... me encantaría ser esa referencia divertida que te hace reír a solas cuando las piensas...

... me encantaría ser parte de esos versos que con tanto desafano lees y plasmar las sonrisas de los que te escuchan...

... me encantaría ser esa indiferencia con la que actuas y que te convierte en el misterio mismo...

... me encantaría ser uno de esos personajes de los libros que lees con detenimiento y que me imagines en un pasaje...

... me encantaría ser esa música suave que pones en las noches y que acompañan hasta que cierras los ojos....

... me encantaría ser esas arrugas que tienes en la frente y transmitir esa sabiduría con la que miras la vida ...

... pero de pronto, me encantaría ser que ésta que soy,  la leas y pienses que no pretendo ser ninguna de las cosas que te encantan... aunque de vez en cuando, me encantaría...

... que ésta esta que soy y te admira tímidamente...

.... y te piensa en la libertad absoluta que le otorgas...

... le enseñes tu mundo y la hagas sonreír como hasta ahora en un secreto lo haces.

No te espero, ni espero... me gusta más verte en libertad pero si algún día me convierto en aquello que te encanta, ojalá... no sea aquello que te gustaría, sino esto que soy.